La capacidad de la semilla de mango africano para suprimir el hambre ha sido usada por las tribus de África occidental. Su uso se hacía cuando tenían que prepararse para una cacería y estar horas sin sentir hambre.
Entre el resto de factores beneficiosos se encuentra el alto contenido en fibra dietética soluble en agua que contienen sus semillas. Con ello el mango africano agrega volumen a las heces y puede aliviar el estreñimiento. Favorece la eliminación de toxinas acumuladas en el intestino por los malos hábitos alimenticios y del exceso de colesterol y triglicéridos, por lo que además tiene efectos beneficiosos para la salud cardiovascular.
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